La traducción científica y la traducción técnica son dos modalidades de traducción especializada estrechamente relacionadas, por lo que muchas veces se hace difícil establecer la diferencia entre ambas.
Las dos disciplinas comparten el mismo campo de actuación, el científico-tecnológico, trabajando en áreas como la medicina, la química o la biología, entre otras. Ambas usan también muchas veces un léxico especializado similar y abreviaturas específicas.
Por ello, no son pocas las ocasiones en las que puedes dudar sobre qué tipo de servicio de traducción necesitas para tus textos. En este artículo vamos a enumerar las principales diferencias entre ambos tipos de traducción.
1. La intencionalidad del texto: teoría vs. experiencia
El principal objetivo de los escritos del ámbito científico es dar a conocer los conocimientos, las teorías y los estudios desarrollados por los profesionales de este sector. Se trata de una comunicación con un gran sesgo académico y teórico.
En cambio, los textos técnicos persiguen el objetivo de dar a conocer la información desde una perspectiva más práctica y enfocada a su aplicación. Es una comunicación dirigida a una enseñanza empírica.
2. Tipos de textos divulgativos
Si bien ya hemos mencionado los puntos en común entre ambas especialidades, el enfoque más teórico de la traducción científica y el enfoque práctico de la traducción técnica determinan el tipo de textos a los que se destinan.
De este modo, la traducción científica es la utilizada en libros de texto, ensayos, tesis y artículos teóricos.
La traducción técnica, en cambio, está orientada a manuales de uso, manuales de instrucciones, patentes, asistencia online, guías y fichas de características técnicas.
3. Disciplinas más comunes de la traducción científica y la traducción técnica
Una vez más, insistimos en la íntima relación que existe entre ciencia y técnica. No obstante, cada una de ellas tiene un carácter divulgativo específico que la hace prevalecer sobre la otra en distintos ámbitos.
La traducción científica es la más demandada en textos relacionados con la medicina, la biología, la farmacia, la antropología o la bioética.
La traducción técnica, en cambio, es más habitual en los ámbitos ligados a la industria y en disciplinas como la ingeniería, la telecomunicación, la metalurgia, la electrónica, la computación o la automoción.
4. El público objetivo al que se dirigen
Ambos tipos de traducción se dirigen a un público objetivo con diversos grados de especialización, desde estudiantes, docentes, investigadores y divulgadores hasta un público inexperto en estas materias pero con interés por aprender, incluso aunque no sea con un objetivo profesional.
La diferencia viene marcada por el fin del texto en sí. En el caso de la traducción científica se trata de textos teóricos que requieren una lectura pausada y están orientados a la adquisición del conocimiento.
La traducción técnica, por otro lado, busca transmitir la aplicación de la ciencia como medio para obtener un resultado práctico y más inmediato.
5. La función del lenguaje utilizado
Los traductores especializados en la traducción científica y la traducción técnica saben adaptarse a las características y a la finalidad de cada texto. Conocen la terminología adecuada y el registro idóneo que deben aplicar.
El lenguaje de una traducción científica es culto y académico, como corresponde al ámbito teórico. Por su parte, la traducción técnica es eminentemente práctica y huye de circunloquios, buscando la concisión que haga al texto más accesible y, por ende, facilite su aplicación práctica.
Tanto si precisas una traducción científica como una traducción técnica, contar con la calidad y la experiencia de una empresa de traducción profesional te asegura el éxito en todas las disciplinas.